Micro empresarios de la calle. En el malecón sur del río Quillcay, se han generado algunas pequeñas actividades económicas, como los talleres de bicicletas al paso. Aquí, los usuarios suelen llevar diariamente, sus pequeñas unidades de transporte personal. El año pasado tuvieron que paralizar sus actividades, pero hoy, felizmente lo retomaron.
«Ahora felizmente podemos trabajar, nos dejan hacerlo, siempre cuidándonos y cuidando a los clientes» refiere Felix Gabriel, técnico en la reparación de bicicletas. «Tengo más de 40 años dedicado a esta actividad» añade.
Junto a él, en las orillas del río Quillcay y junto al puente Comercio, trabaja su esposa Felisa Yauri, atendiendo proactivamente a sus usuarios. Lo hacen diariamente y los precios al alcance del público con entrega inmediata.
«No es mucho lo que se gana, porque cobramos desde un sol, pero de todas maneras nos deja para poder llevar algo a la casa» menciona. Gracias a esta labor, lograron educar a los hijos.
A esta labor, también se suma otra trabajadora de la familia. Este pequeño espacio, brinda oportunidad de trabajo para cuatro personas.
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